El espacio, el tiempo y el arte a veces coinciden para regalarnos momentos de vida, para llenar de oportunidades la España vaciada. Hace varios meses vi un boceto en el perfil de Instagram de Fanidfanidad que era una declaración de intenciones. Un boceto que partía de una foto antigua de un pueblo de los campos de Castilla que componían los versos de Antonio Machado. En esa foto aparecían familiares de mi amigo Alberto en un pueblo regado por el río Duero, Miño de San Esteban, en Soria. Su pueblo.
El boceto reflejaba la historia de toda una región con la que yo también crecí. Los recuerdos de familia siempre han estado vinculados al campo, a mares dorados de cereal con fronteras de pinares, a las arrugas que identifican las caras de los lugareños, a esa España vaciada donde se humanizaba la locura, donde la colaboración era sinónimo de supervivencia, donde los bancos en la puerta de las casas eran verdaderas redes sociales, donde los stories eran las celebraciones de las pequeñas cosas de la vida. Una España vaciada llena de significados y recuerdos necesarios para repensar en estos tiempos que corren.
En este momento en el que la #EspañaVaciada quiere formar parte de la agenda política, varias reflexiones y cuestiones salen a la luz para plantearnos qué futuro queremos dar a los territorios olvidados y qué futuro queremos tener como sociedad:
- ¿Una mirada global que incluyera el ámbito rural y otros territorios daría alternativas a la contaminación en las grandes urbes y por consecuencia el desarrollo en pequeñas/medianas ciudades y pueblos?
- ¿El desarrollo de las nuevas tecnologías que favoreciera la autonomía de los pueblos y de los individuos que en ellos viven?
- ¿La apuesta seria con planes de innovación y emprendimiento en entornos poco desarrollados por parte del estado? A nadie se les escapa que esto es significado de inversión a medio y largo plazo, abandonando el cortoplacismo al que nos tienen acostumbrados y acostumbradas.
- ¿La flexibilidad para la creación de nuevas empresas en esos territorios y la flexibilidad de las empresas fomentando el teletrabajo?
- ¿Un planteamiento del estado del bienestar aplicado a los nuevos tiempos donde los servicios sociales jueguen un papel relevante?
¿Realmente queremos mirar hacia otro lado y borrar los recuerdos de nuestros pueblos y eliminar los productos y la vida que nos conceden? Estoy convencida de que no. Fani me lo ha demostrado cuando cada cierto tiempo su perfil social se llenaba de andamios, cubos de pintura y pinceles que jugaban a llenar de blancos, dorados y marrones una pared. Hoy, este es el resultado.
Este mural es un homenaje a las personas que hicieron del lugar que habitan o habitaban un lugar cargado de historia y dignidad, que merece la pena no olvidar y recordar a través del arte que el campo ha tenido, tiene y quiere continuar teniendo vida. Es el momento de llenar estos territorios de oportunidades entre todos, entre todas.
Acertado lo de nombrarlo vaciaDa…vaciada y olvidada..pues la merma de recursos, de inversiones…es un elemento esencial para ese proceso de despoción…
Hay que reivindicar los mismos derechos que el mundo urbano, para qye quien quiera permanecer en el mundo rural lo pueda hacer en igualdad de oportunidades y dignidad!!
Gracias Ana por poner voz y ser altavoz de ese nuestro mundo rural!!
Como siempre en ti, bravo por esa visión crítica pero a la vez positiva, esperanzadora y llena de valores de una realidad que conoces, vives y sientes. Hagamos grande esa España vaciada, cuna de personas excepcionales.
Gracias, Montse. Ese siempre será nuestro lugar y, qué curioso después de un año, cómo ha cambiado la perspectiva de querer llenar esa España
Hagámosla siempre, con personas que merezcan la pena