Cuando hablamos del Daño Cerebral Adquirido (DCA) nos referimos a un cerebro que ya se ha desarrollado con total normalidad, que pudo haber tenido o no algún trastorno en el neurodesarrollo durante el nacimiento y el principio de la adolescencia, y que de forma inesperada el cerebro es dañado por causas internas o externas. En nuestro centro Grupo 5 CIAN Navarra, (Centro Integral de Atención Neurorrehabilitadora) contamos con servicio especializado en rehabilitación neurológica en el que nuestros profesionales cuentan con amplia experiencia el tratamiento de secuelas neurológicas dejadas por afecciones como estas.

Por el Día Mundial del Cerebro (22 de junio), vamos a hacer un recorrido sobre el daño cerebral, sus causas y secuelas y por qué es tan importante una rehabilitación temprana, para subrayar que el cuidado del cerebro debe continuar tras un daño cerebral o ictus.

¿Qué es el daño cerebral adquirido?

El cerebro es el órgano del cuerpo humano encargado de organizar, recibir y responder a los estímulos que vienen tanto del medio interno como externo, así como la regulación de las funciones. Se comienza a desarrollar desde la cuarta semana de la gestación

El Daño Cerebral Adquirido (DCA) puede afectar a niños, adultos y adultos mayores. Ocurre cuando el cerebro ya ha cumplido con su desarrollo y en un momento inesperado una causa propia del cuerpo o una que pertenece a factores externos, produce una alteración.

Esta afectación dependiendo de la zona afectada, el tipo y tamaño de la lesión va a cursar con diferentes consecuencias, como pueden ser dificultades atencionales, déficits cognitivos, conductuales o déficits de tipo motor, entre otros.

Para que un niño o niña pueda ser diagnosticado con DCA debe presentar durante la fase aguda alguno de estos síntomas: pérdida de conciencia, amnesia retrógrada, fractura de cráneo o cuello, dolor de cabeza, náuseas, vómito, entre otras.

Pero para entenderlo mejor, vamos a ir por partes:

¿Cuáles son las causas del DCA?

El Daño Cerebral Adquirido en los adultos es causado por factores externos e internos:

• Accidente Cerebro Vascular.
• Traumatismo Craneoencefálico.
• Tumores cerebrales.
• Infecciones.
• Hipoxia y anoxia cerebral.
• Enfermedades nutricionales, falta de vitaminas.
• Hipoglucemia, etc.

¿Y cuáles son sus secuelas?

Como ya hemos mencionado anteriormente, dependiendo de diferentes factores se presentarán distintas secuelas ante un Daño Cerebral Adquirido, en los adultos están las siguientes alteraciones:

• Alteraciones motoras: como hemiparesia, problemas de equilibrio, alteraciones del tono muscular.
• Alteraciones cognitivas
• Problemas atencionales, memoria, desinhibición, agresividad.
• Depresión e irritabilidad.
• Trastornos sensoriales, visuales.
• Dolor neuropático.
• Dificultades para realizar actividades de la vida diaria.
• Cambios en la participación a nivel social.

¿Por qué es importante una atención temprana?

La mayoría de los estudios publicados hasta la fecha son contundentes al afirmar que existe una mayor eficacia del tratamiento neurorrehabilitador cuanto más precozmente se instaura el mismo.

Se ha demostrado que los días desde la lesión hasta el comienzo de la rehabilitación son, tanto en ictus como en traumatismo Craneoencefálico, un predictor de funcionalidad al alta y de institucionalización. Además, el inicio temprano del tratamiento neurorrehabilitador se asocia a una menor estancia hospitalaria.

La rehabilitación de los pacientes con daño cerebral debe comenzarse en las 24-48 primeras horas con acciones sencillas como la movilización precoz en el ámbito físico y la adaptación del entorno y orientación a la realidad, o el abordaje de déficits específicos como la negligencia o la afasia en el ámbito cognitivo.

Es por todo lo anterior descrito, que es necesario acudir a un centro especializado en rehabilitación neurológica para iniciar cuanto antes la actividad rehabilitadora y así, como decíamos al comienzo, cuidar de nuestro cerebro -y de nuestro bienestar- aún habiendo sufrido una afectación.

El equipo profesional de CIAN Navarra busca este bienestar realizando una evaluación completa de las cuatro áreas: Logopedia, Neuropsicología, Terapia Ocupacional y Fisioterapia. Tras esta, se comienza el trabajo rehabilitador interdisciplinar y coordinado cuando el paciente tenga una mínima estabilidad clínica, trabajando desde la fase aguda a post-aguda y de ambulatorio al contar con un centro que integra residencia, centro de día y tratamiento ambulatorio.

Nuestro proyecto se compromete con la mejora de la vida familiar, social y laboral, para desarrollar la autonomía de las personas y cuidar de su cerebro, de ellas y de sus familias. 0