El proyecto de cine inclusivo Creo, lo creo y no me corto ya está en marcha

13 noviembre 2012
“Creo, lo creo y no me corto” es un proyecto de cine inclusivo, promovido por diferentes entidades y personas, cuyo objetivo es realizar un cortometraje de ficción de calidad a través de un equipo formado por personas en riesgo de exclusión social (cuyo objetivo vital es el cine), por profesionales y estudiantes.

“Creo, lo creo y no me corto” es un proyecto de cine inclusivo, promovido por diferentes entidades y personas, cuyo objetivo es realizar un cortometraje de ficción de calidad a través de un equipo formado por personas en riesgo de exclusión social (cuyo objetivo vital es el cine), por profesionales y estudiantes.

Los espacios posibilitan encuentros a través de los cuales surgen oportunidades como ésta, la de realizar un corto inclusivo que facilite el acercamiento del cine a personas en riesgo de exclusión social. La idea del proyecto nace cuando Sergio Aguinaga, Presidente de Asociación HAZ visita a Raúl Moreno, usuario del Centro de Rehabilitación Psicosocial Latina, en el propio CRPS. Ambos participan juntos como equipo técnico (productor y ayudante de iluminación respectivamente), en un proyecto de cine inclusivo titulado “HAZTUCINE” que en ese momento estaba en la fase de postproducción, con gran visibilidad y resultados muy positivos. María Salazar, Directora del CRPS, les acompaña en la visita y les propone a ambos charlar con el actor Carmelo Gómez, que a su vez lleva varios meses junto con Javier Gutiérrez y Andrés Lima colaborando con el centro, en la realización de diferentes talleres pedagógicos de interpretación e improvisación, en principio debido a su papel en la obra de teatro “Elling” (ficción basada en una novela y posterior película sobre la gran aventura de la vida independiente de dos personas con enfermedad mental) y más tarde como parte del compromiso de Carmelo Gómez.

En esta reunión improvisada, Carmelo Gómez y Raúl Moreno, manifiestan la inquietud de llevar a cabo una acción o proyecto que plasme lo compartido en los talleres del centro, la posibilidad de generar un grupo de trabajo para fundamentalmente, dejar de lado las reflexiones y las preparaciones y hacer algo creativo de calidad, ligado a lo audiovisual y que sea representativo de sus inquietudes, en definitiva: pasar a la acción. Pactan una fecha para hacer un grupo de trabajo con diferentes personas del centro pero también deciden abrirlo a personas con discapacidad, con enfermedad mental y/o privadas de libertad.

“Creo, lo creo y no me corto” acerca y da a conocer las diferentes disciplinas audiovisuales como una actividad creativa y profesional a personas en riesgo de exclusión social incluyéndolas en un proceso y en un equipo creador de un corto. También pretende sensibilizar a la sociedad a través de la ficción audiovisual sobre los valores positivos de la igualdad e inclusión de personas con menos oportunidades.

Construcción de un proyecto

En su objetivo de acercar el mundo del cine a los y las participantes de «Creo, lo creo y no me corto» el proyecto se desarrolla en distintas fases. Hasta este momento se ha desarrollado la fase de Escritura Creativa, Improvisación y Creación de personajes. Carmelo Gómez enganchaba a los futuros actores y actrices: «el mejor abogado del personaje, es un buen actor». Los sueños, la violencia, la poesía, la vergüenza, el amor, el miedo, la muerte, los sentimientos paralizantes, la cotidianeidad donde ocurre lo extraordinario, el éxito, la fama… salían en las improvisaciones para crear los personajes y las historias sobre los que basar el cortometraje. Historias que Inma, Teresa, Jorge, David, Raúl… ponían sobre la mesa y que a través de un personaje enlazaban.

En estos momentos el proceso está en formación en disciplinas de cine en la ECAM (Escuela de Cinematografía y del Audiovisual de la Comunidad de Madrid): Guión, Realización, Foto, Arte, Producción, Sonido, Maquillaje/FX, Interpretación, tras este período formativo cada participante elegirá la disciplina que más le ha interesado para desarrollarla y rodar en diferentes localizaciones. El proyecto está subvencionado por la Fundación Universia ya que el proyecto fue premiado en las Ayudas a Proyectos Inclusivos.

El resultado del corto lo podremos ver en 2013. Cuatro historias que hablan de pasiones y emociones, cuatro historias unidas por un hilo conductor, cuatro historias inclusivas en un proyecto: «Creo, lo creo y no me corto». Podéis seguir todo lo relacionado con el proyecto a través del blog: http://proyectocreolocreoynomecorto.blogspot.com.es

Fundación Aldaba: es una entidad privada y sin ánimo de lucro, que nace en 1999 con el próposito de generar nuevos servicios que redunden en el desarrollo del sistema de los servicios sociales y el bienestar de los ciudadanos más desprotegidos.

Asociación Haz: La asociación tiene como fin ser una plataforma para la visibilidad, la inclusión y la participación de los diferentes colectivos en riesgo de exclusión social (infancia, jóvenes, personas con discapacidad intelectual o física, enfermedad mental, tercera edad, mujeres e inmigrantes, etc.) mediante el desarrollo creativo de acciones y espacios artísticos multidisciplinares, en donde participen directa o indirectamente.

Centro de Rehabilitación Psicosocial Latina: El CRPS Latina forma parte de los dispositivos de la “Red pública de Atención Social a personas con enfermedad mental grave y duradera” de la Consejería de Asuntos Sociales, dependiente de la Dirección General de Servicios Sociales de la Comunidad Autónoma de Madrid y es gestionado por Grupo 5.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *