Puedes contarlo de otra manera. Reescribe el guion de nuevo.

Apasionante, excitante e ilusionante. Estas 3 palabras podrían resumir una vida, si no fuera porque van dirigidas a lo experimentado en una nueva parada de la Campaña cuéntamelo otra vez, un proyecto colaborativo entre personas atendidas en el centro de día y centro de rehabilitación laboral Espartales Sur y los equipos que las atienden para poner de manifiesto discriminaciones reales vividas en diferentes contextos.

La convención anual de Clariane, nos abrió sus puertas y allí pudimos contar a 52 profesionales del ámbito sociosanitario esta campaña y a su vez hacerles reflexionar sobre la pregunta: ¿Qué haces en tu práctica diaria para evitar cada una de las situaciones estigmatizantes que en ella aparecen?

Y como no podía ser de otra manera al igual que estableció Newton, en su 3ª ley del movimiento, según la cual para cada acción hay una reacción igual y en sentido contrario; haciendo una extrapolación de dicha ley al ser humano, los y las profesionales encuentran antídotos sociales en forma de vacunas inclusivas para generar conductas iguales, pero en sentido contrario (no discriminatorias) cuando atienden a personas que experimentan graves problemas de salud mental.

La búsqueda de palabras que pudieran describir la reacción de lo que cada uno de los episodios de la Campaña trata de reflejar nos llevó a 6 palabras y dos frases: desconfianza, infantilización, sobreprotección, invalidación, tú no sabes y ya lo hago yo, rechazo, violación de derechos y soledad.

Las vacunas inclusivas encontradas para contrarrestar la discriminación hacen referencia a conductas que acercan y apelan a que la diversidad no ha de ser un obstáculo para hacer valer los derechos y encontrar apoyo en las múltiples necesidades ( sociales, afectivas, laborales, sanitarias, familiares…) a las que nos/les desafía la vida: confianza recíproca, cercanía, respeto, empatía, escucha activa,  tratar conforme a la edad que se tiene, permitir la responsabilización, permitir la equivocación, respetar los deseos , apoyar las decisiones, validar los sentimientos, reconocer las emociones, brindar oportunidades para que hagan   elecciones diarias, dejar de ocupar el espacio comunicativo  para que sean ellos y ellas quienes lo hagan, proporcionar espacios para que se expresen, preguntar antes de ofrecer ayuda, ofrecer oportunidades sociales para que sean incluidos, ser persistente en el apoyo,  reconocer sus logros por pequeños que sean,  promover la educación en derechos humanos, generar  leyes efectivas con presupuesto, respetar la privacidad de la persona y su información médica, acompañar, ser parte  activa  de su vida y generar iniciativas con el tejido comunitario.

Hay claridad en cuanto a los ingredientes necesarios para reescribir el nuevo guion de vida que nos permitirá llegar a aminorar los juicios ajenos y la exclusión de los múltiples espacios que la vida brinda. Seguimos creyendo que entre todas y todas podemos contribuir a una sociedad más justa, empática e inclusiva.

Reescribamos nuevas conductas desde el mayor numero de contextos posibles por el que transitamos, acompañando a las personas que atendemos e identificando las barreras a derribar para evitar las discriminaciones externas y aminorar la autoestigmatización.