Los alumnos de Añaza de un proyecto formativo ofrecen sus creaciones gastronómicas en el centro situado en la Casa Cuna
La segunda edición del proyecto social y formativo SaboreAñaza – Hermano Pedro reunió ayer a 10 alumnos de cocina de la Fundación Canaria el Buen Samaritano en una clase magistral con parte del equipo de cocina del Hotel Bahía del Duque.
Los estudiantes tuvieron la oportunidad de poner en práctica los conocimientos adquiridos a lo largo del curso cocinando junto a Juan Miguel Cabrera, chef ejecutivo de Bahía del Duque; BraulioSimancas, chef del restaurante Las Aguas; y Lucas Leandro, primer maître del hotel. Como novedad en esta edición, el menú fue degustado por las personas usuarias del Centro de Adultos Hermano Pedro, gestionado por la Fundación Canaria Sagrada Familia y Grupo 5.
Además de comprobar el alto nivel de las promesas de la cocina, los participantes en la cata quisieron contribuir a visibilizar la importante labor que se realiza dentro del proyecto Añaza por sus Jóvenes de la Fundación Canaria Buen Samaritano y de las personas que forman parte del Centro de Adultos Hermano Pedro de la Fundación Canaria Sagrada familia y Grupo 5. La directora de Responsabilidad Corporativa de CIO, Mónica Rumeu, felicitó a la Fundación Canaria Buen Samaritano y a la Fundación Canaria Sagrada Familia por el «importante papel» que desarrollan.
La jornada se desarrolló en los jardines del centro de Adultos Hermano Pedro, en la Casa Cuna, rodeados de un entorno de belleza natural que desde su apertura, en 1998, se ha ido transformando en un espacio botánico y de relajación para disfrute de las personas que conviven en el Centro. En el centro existen zonas diferenciadas como el huerto, cobijo para nidos de pájaros, árboles frutales, arbustos de especias, mariposario, zona chill-out con vistas al mar y el campanario de la Casa Cuna de la capital tinerfeña.
El menú incluyó como entrantes sopa fría de tomate de nuestro huerto y millo liofilizado, ensaladilla de papa negra y caballa, tabla de quesos canarios DO, mousse de salmón ahumado, huevas y berros silvestres y tofe de remolacha y requesón. Entre los platos principales estaban crema de calabaza y naranja, atún en mojo hervido, bacalao, batata y escacho de cebolleta; mini burguer de cochino negro y pinchitos de pollo en adobo tradicional. Para cerrar, yogur, fresas y rosas; gofio, plátano y galletas y chocolate.